Es muy fácil para nuestra generación caer en algunos vicios
-No encontrar una pareja
-No sentirse conforme con el trabajo actual
-No ‘encontrar un propósito de vida’ que valga la pena
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Esas situaciones se vuelven vicios cuando las razones detrás son
-Creer que siempre llegará alguien mejor
-Creer que ‘este no es el trabajo de mis sueños’
-Creer que un propósito de vida debe ser algo enorme
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El punto ciego de todo es querer vivir sin el dolor que implica negar todas las demás opciones.
Escoger una pareja implica negar a todas las demás personas. Aceptar que quien está delante de nosotros tiene defectos, grandes e irritantes. Su belleza es no solo limitada, sino temporal.
Realizar un trabajo implica negar todas las responsabilidades y actividades que los otros trabajos implican. Si eres doctor, no estarás pintando cada mañana. Si eres una abogada, no estarás en un laboratorio investigando la cura al cáncer.
Escoger un propósito de vida implica negar los demás. Puedes proponerte jubilar a tus papas, pero eso implica no ayudar a combatir la hambruna por ahora.
Una poderosa herramienta para el siglo XXI es aceptar.
Aceptar que se puede ser todo, pero no todo al mismo tiempo.
Los medios han borrado ese dato lógico de nuestras cabezas.
Si puedes escoger una opción, y además abrazar el dolor que conlleva negar todas las demás opciones, serás más feliz con la opción que escogiste.
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Escoge una cosa,
niega todo lo demás,
y deja que el tiempo haga su trabajo.
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-JL
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