Escoge tus puntos débiles

Uno de los amigos que más admiro, fuma como chimenea, pero es un completo empresario. Otro amigo que hace muchísimas ventas, pareciera no poder dejar de apostar. Y si me tocara poner mi perspectiva, mis días más productivos son donde paso las 5 tazas de café aunque a veces implique no conciliar el sueño y tener un día inservible la mañana siguiente.

Y después de darle muchas vueltas, creo que la clave está en escoger tu lado malo. Verlo directamente a los ojos, aceptar sus consecuencias, y abrazarlo mientras sea sostenible y tu cuerpo no te escupa la factura en la cara.

Alguna vez alguien me dijo que tenía que aprender a que mis emociones no me gobiernen. Porque al parecer soy bastante impulsivo. Pero no sé qué tan de acuerdo estoy con eso. 

En un libro muy bueno, llamado El obstáculo es el camino, de Ryan Holiday, Entendí que no existen tales cosas como “nuestras fotalezas o debilidades”. Tenemos características. Eso es todo. Cada característica en algún lado nos va a hacer la vida imposible, pero en otro, le podemos exprimir hasta la última gota a nuestro favor.

En este preciso momento. Tengo algunos pendientes importantes como avances en mi trabajo de graduación. Pero estoy aquí. Escribiendo y grabando esto, en un momento impulsivo, y por supuesto, con unas 3 tazas de café encima.

Creo que la belleza reside en eso. No solo reconocer las características. Sino también escoger nuestros demonios. Nuestra forma lenta de morir. Siempre entendiendo que puede faltar el balance en algunos periodos; aunque siempre haya que retomarlo para evitar morir de paro cardiaco a los 40 o que los pulmones no dejen de funcionar a los 50.

No digo que tengamos un estilo de vida insano. Pero sí que incluso para la moderación, debe haber moderación; como dice Roberto Martinez.

-Jose.

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